jueves, noviembre 01, 2007

Estrella

SIN TITULO

Era 31 de diciembre en un pueblo a las afueras de la ciudad, faltaba poco para la media noche, hacia frio, mucho frio, la calle estaba vacía y era raro para ser un día en el que casi es año nuevo, al parecer todos había salido a la cuidad, ahí estaba ella en medio de la calle llorando, había reñido con sus padres y a pesar de la fría noche salió para poder relajarse, no supo cuanto camino.

No le preocupo estar sola en la calle y a esa hora de la madruga al fin que ella conocía bien esos territorios y los había caminado una y mil veces, de repente voltea a su derecha por que siente que alguien la ve…

-Martha ven a la fiesta…

Alguien le dijo…

Ella volteo y era Jaime un viejo amigo de la infancia al cual tenia años sin ver. Se acerca lo saluda y le da un fuerte abrazo.

-No puedo, tengo que regresar a casa con mis padres- (dice ella)

-Anda solo una hora, nada va a pasarte con que estés aquí por una hora, además tenemos mucho que platicar.

Entro a la casa era una casa extraña que nunca había visto o tal vez no le había puesto atención, el frio se sentía con mas intensidad, y entonces le dice Jaime.

-Voy a traerte un abrigo ya que hace mucho frio.

Ella dijo si, con un gesto.

El tiempo paso y ella veía a la gente de la fiesta con extrañeza era gente distraída y que en ningún momento la saludo, Jaime no regresaba y ya era casi una hora, fue a la parte de arriba a buscarlo, pero no había rastro de el, grito su nombre pero el no respondía, sintió mucho sueño al entrar a una recamara, se recostó, y se quedo dormida…

Al día siguiente despertó y el sol estaba muy fuerte, y vio en el piso a Jaime tirado en la puerta lleno de sangre se acerco y se percato que no tenia los ojos…ella grito, y de repente escucho un ruido en el closet salió corriendo pero no traía zapatos no pudo avanzar mucho cuando resbalo por las escaleras, de pronto el cielo se torno gris ya no había sol…

Salió al patio de la casa y había mucho arboles, arboles que no había visto la noche anterior, se escondió donde pudo atrás de un árbol después detrás de otro, se escuchaba una respiración mas agitada que la de ella y el crujir de las hojas, en un descuido quiso salir para esconderse detrás de otro árbol y alguien la agarro de su cabello, trato de zafarse pero era tarde...ella no pudo escaparse, ese día estaba destinado para…su muerte…

Hoy cada año el 31 de diciembre se dice que hay una chica que invita a los jóvenes a una fiesta, una fiesta de la cual nunca regresan…


Mayra

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